Conocemos ampliamente la predilección que sentía nuestro amado General Perón por cultivar las facultades intelectuales, conformàndose como un àvido lector y un fabuloso escritor, construyendo una obra político literaria que ya es patrimonio de la entera humanidad. Hoy recordamos su gusto por la mùsica, en especial por un gènero: el Tango. Es conocida la amistad del General con Homero Manzi, el inolvidable y entrañable Hugo del Carril y Carlos Acuña. En una actuación de Hugo del Carril llevada a cabo ante Perón y Eva en 1949 en la quinta presidencial, el genial compositor le dedicó estas palabras al General: " Discúlpeme Presidente, que un payador del camino, alce su verso prístino ante tanta concurrencia". Era el estreno de "Versos de un Payador a Juan Peròn", escrito por Homero Manzi. Cuenta la leyenda que al terminar la interpretación , Evita le dijo a Manzi : "¿Y para mí no tiene nada?". Semanas despuès, Hugo Del Carril grabó: "Él es el verbo mayor y usted su mayor templanza, él es la punta de lanza y usted la punta de amor,él es el grito de honor que hasta el deber nos alcanza, y usted la mano que amansa cuando castiga el dolor, él es el gran sembrador y usted la gran esperanza".
Una anécdota nos refleja de cuerpo entero la enorme sensibilidad del General Perón, en esta oportunidad plasmada en sus gustos artísticos: El recordado cantante de Tango Edmundo Rivero relató que, estando el General en 1959 en el exilio en Madrid, con frecuencia asistía a sus presentaciones, y que en una ocasión, mientras interpretaba "Cuándo me entres a fallar" (de Flores y Aguilar), "fue algo más que emoción y se le cayeron unas lágrimas. Se notaba que al hombre, por algún motivo, la letra le tocaba muy adentro".
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